Despresurización de un avión

Todos hemos visto películas donde la ventana de un avión se rompe y la gente sale despedida, volando sin remedio hacia el agujero. La realidad, terrícolas, es que el aire consigue equilibrar su presión con la de el exterior en apenas un segundo, dependiendo de la altitud a la que el avión se encuentre.

Así que la gente dentro del avión percibiría un bajón repentino de la presión. Tal vez un empuje breve e intenso hacia la ventana, de apenas décimas de segundo e insuficiente para sacarles volando del avión.

Ah, y el avión no necesita de presión interior para volar: no entraría en barrena por sufrir una despresurización de la cabina. El problema es si la gente podría respirar, pero con las mascarillas, debería. Aparte, tardaría poco en alcanzar una altitud suficiente como para permitir a la gente sobrevivir sin problemas.

Hay muchos casos documentados de aviones que han aterrizado con un agujero en el casco. No diré que no es un problema, pero no es para que la gente salga volando, se estrelle de forma irremediable o, como he llegado a ver, explote.

No apagar los tubos fluorescentes

Es cierto, terrícolas: un tubo fluorescente gasta más energía en su encendido que al iluminar... algo menos de 10 segundos. O sea, que si te vas de la habitación durante 10 segundos o más, mejor apágalo: gastarás menos.

La pérdida de vitamina C

La vitamina C se degrada con el tiempo en un zumo de naranja. Es cierto. Pero claro: eso lo escucha un tipo y deduce que lo hace a toda velocidad. ¡Corre, terrícola, bébete el zumo o no tendrá vitamina C!

La velocidad a la que se degrada la vitamina C no es tan rápida. No es plan dejarse el zumo hasta dos días después de hacerlo, pero en general si uno se hace una jarra y se la va bebiendo a lo largo del día obtendrá un buen aporte de vitamina C.

El truco de la cucharilla en la botella de cava

¿En serio? ¿De verdad hay que desmentir esto? ¿Es necesario, terrícolas?

¡¿De verdad alguien cree que poner una cucharilla retiene las burbujas de un vino espumoso?!

Mozart vs Salieri

En la famosa película sobre Mozart plantean una hipotética enemistad entre ambos compositores que no tiene base alguna. Hasta donde se sabe, existía una cierta rivalidad profesional, pero nada más allá de eso. De hecho, se cree que eran amigos. Salieri tomó como alumno a uno de los hijos de Mozart.

Es cierto que la prensa del momento se hizo eco de la posibilidad y publicó numerosas noticias relacionadas con un posible envenenamiento y apuntando a Salieri como autor. Nada se demostró, y la propia mujer de Mozart no dio crédito a las noticias, que hoy se cree que fueron más habladurías que realidad. En sus últimos días, con aguda demencia senil, Salieri dijo en repetidas ocasiones que había matado a Mozart. Pero se piensa que fue producto de todo lo que leyó, no de que realmente lo hiciese.

Despertar a un sonámbulo

No pasa nada, terrícolas. Si se despierta a un sonámbulo no le va a dar un patatús ni nada por el estilo. De hecho, suele ser positivo, porque la probabilidad de que se haga algo estando dormido es mayor que la de dañarse por darse un susto.

La redondez de la Tierra

En la Edad Media creían que la Tierra era plana. ¡Mentira, terrícolas! En general, en la Edad Media se sabía que nuestro planeta es cuasi-esférico. Lo que hizo que el viaje de Colón fuese atrevido es que, aparte de pensar que había criaturas peligrosas por el camino, la distancia hasta las Indias por el oeste era excesiva para poder llevarse a cabo.

Lo irónico es que, si lo miramos desde una perspectiva actual, lo era. Tenían toda la razón. Colón tuvo la gran suerte de que había un pedazo de tierra a mitad de camino, que si no habrían muerto antes de pisar las Indias.

Memoria de pez

O sea, una memoria perfectamente aceptable, habida cuenta de que los peces, terrícolas míos, no tienen mala memoria.

Los rayos no caen dos veces en el mismo sitio

Se suelen escuchar por ahí expresiones como "un rayo no cae dos veces en el mismo sitio" o "no caen dos rayos en el mismo lugar".

Lo primero es cierto: un rayo no cae dos veces en el mismo sitio, por la sencilla razón de que ya ha caído. El que caiga la segunda vez será otro rayo.

Pero la otra expresión es falsa, terrícolas. De hecho, es común que caigan varios rayos en el mismo lugar. Cuando una tormenta pasa sobre una zona y, en ella, hay algún elemento más "atractivo" para los electrones de la nube, como pueden ser antenas, pararrayos o árboles solitarios en mitad del campo, lo normal es que todos los rayos que caigan lo hagan ahí: en el mismo sitio. Por poner un ejemplo típico: la antena superior del Empire State Building es alcanzada por una media de 100 rayos al año.

Pantalones ajustados y fertilidad masculina

Existe la idea de que los pantalones ajustados generan un aumento de temperatura en los testículos que genera infertilidad. Es cierto... en parte. Si bien la frase es estrictamente correcta, genera la idea de que esa infertilidad es permanente. No, terrícolas: se trata de un problema temporal. La producción pierde calidad durante un par de días. Tras ellos, los testículos vuelven a su habitual actividad.